Podría empezar diciendo que el sueño de mi vida siempre fue ser psicóloga, pero lo cierto es que no siempre fue así. Sería precioso poder decirlo, pero la vida no suele ser un camino recto. No siempre sabemos lo que queremos desde un principio, de hecho, lo más normal es que no tengamos ni idea o que cambiemos de opinión varias veces hasta que nos encontramos a nosotros mismos y lo que nos hace felices.

Después de darle muchas vueltas durante años y pasar por etapas en las que no sabía ni qué hacer con mi vida, me di cuenta de que me hacía sentir bien escuchar a los demás e intentar ayudarles a que se sintieran mejor, optando entonces por esta profesión.

A día de hoy puedo decir que soy psicóloga general sanitaria con formación en duelo, Alzheimer y gestión emocional y que estoy encantada de poner mi granito de arena para apoyar y acompañar a quien necesite mejorar sus dificultades. . Lo que me mueve como profesional y como persona es poder ayudar a los demás a sanar, crecer y confiar en ellos mismos, mediante la terapia y la psicoeducación en los temas más relevantes.